Estoy llegando al último peldaño,
me siento fatigado y no por prisa,
subí por la escalera de la brisa
por ser ave que vuela el desengaño.
Yo trato de alejarme y más extraño,
el eco melodioso de tu risa
y tus besos bordeando la cornisa,
culpables de ser parte del rebaño.
Soy hombre penitente y te perdono
por tanto sufrimiento y tanta pena.
Intenté olvidarte y no he podido.
Si amar es fenecer por tu abandono,
entonces será justa la condena.
Prefiero antes la muerte que el olvido.
Muy lindo Miguel, te sigues superando. Un gran abrazo!!
ResponderEliminarmuy bonito Miguel Nicolás!!!!...un abrazo!!!
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